Gisela, ex-educadora de la Guardería y madre de Orianni, alumna actual, partió hacia el Padre después de una penosa enfermedad.
Gisela inició su trabajo como educadora en la Guardería el mismo día que ésta abrió sus puertas el 19 de enero del 1998 y trabajó con nosotros durante los primeros años. Todos los días se desplazaba desde los Botados de Yamasá para ofrecer su servicio desinteresadamente.
Gisela, tu memoria vivirá para siempre en tu familia, en las personas que tuvimos el placer de trabajar contigo y en todos aquellos niños y niñas a quienes brindaste tu cariño y tu eterna sonrisa.
Descansa en la Paz de Cristo.
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